domingo, 1 de julio de 2012

Mentiras

No, ya no te quiero. Ya no pienso en ti . Ya no sueño contigo cada noche. Ya no paso las noches enteras llorando. Ya no me arrepiento de no haberme despedido de ti. Ya no te echo de menos. Ya no siento que el tiempo pasa lentamente. Ya no miro a todos lados para ver si me encuentro contigo. Ya no me paro a pensar en nuestros buenos momentos. Ya no quiero retroceder en el tiempo para volver a empezar. Ya no busco tu mirada entre los ojos de la gente. Ya no necesito el apoyo de nadie para conseguir pasar página. Ya no me recuerdan a ti los Beach Boys. Ya no siento a mi corazón latir a máxima velocidad cuando oigo tu nombre. Ya no me estremezco al recordar tu olor. Ya no muero por volver a verte. Ya no necesito desahogarme escribiendo textos, aún sabiendo que nunca los leerás. ¿Pero sabes qué? No he podido dejar de mentir. Y no me puedo resistir a engañarme a mi misma diciéndome que ya no te echo de menos. Pero sé que es mentira. Sé que cada día te echo más de menos y que ya me cuesta respirar cuando pienso en que jamás volveré a verte. No, no he dejado de quererte ni un solo día de mi vida. Ni he dejado de pensar en ti. Ni he parado de soñar contigo cada vez que lograba dormirme. Ni han cesado mis lágrimas día tras día. Ni he dejado de arrepentirme de tu despedida. Ni he echado nunca a nadie tanto de menos. Ni he sentido que el tiempo pasara tan lentamente como esta vez. Ni he abandonado mi absurda manía de mirar a todos lados por si vuelvo a encontrarme contigo. Ni he reemplazado ningún otro pensamiento por nuestros buenos momentos. Ni he dejado de desear volver al pasado para arreglarlo todo. Ni cesa la necesidad de volver a verte. Ni he perdido la esperanza de volver a encontrar tu mirada en cualquier esquina. Ni he dejado de necesitar la ayuda de los demás para levantar cabeza. Ni he parado de recordarte al escuchar cualquier canción de los Beach Boys. Ni ha dejado mi corazón de latir a máxima velocidad al oír tu nombre. Ni he dejado de sentir la necesidad de derramar mis sentimientos sobre una hoja de papel. Por si lo dudabas, no, No he logrado sacarte ni un segundo de mi mente. P.D: Te quiero. Hasta el infinito y más allá­.

Lluvia


Llueve. No demasiado. Lo suficiente como para que se pueda oír el suave murmullo de la lluvia cayendo sobre los tejados.
En mi habitación se oye levemente algún tema de The Beach Boys. Me recordaban tanto a ti... Transmitían esa energía que anima a toda alma existente. Justo como tú.
Un solo de guitarra acompañado de la batería. Una oleada de recuerdos. Buenos y malos. Nostalgia. Tristeza. Más recuerdos. Ahora eran más alegres y esperanzadores. Buenos recuerdos que me dibujaban una sonrisa en la boca. Aún recordaba tu expresión inocente. Y de nuevo la tristeza. Los malos recuerdos. Los días enteros acostada en el mismo lugar. Recordándote con anhelo.
Unas lágrimas recorren mis mejillas. Caen lentamente hasta terminar en mi camiseta. Justo en el rostro de Paul McCartney.
Como una estrella fugaz, aparecen de improvisto en mi mente una de tus inocentes bromas. Sonrío levemente. Pero casi al instante recuerdo el mes de febrero. Más lágrimas. Abril. Una cascada de lágrimas interminables. Mayo. Tu sonrisa. Una puñalada al corazón
¿Por qué no te podía apartar de mi mente? Cada recuerdo. que llegaba a mi mente tan rápido como caía una gota de lluvia. Era una puñalada directa al corazón.
Demasiados recuerdos. Demasiada nostalgia. Demasiado dolor para este corazón.